Schneiderman había sido muy activo en el movimiento contra la violencia de género surgido el año pasado
El
ahora ex Fiscal General del Estado de NY, Eric Schneiderman, se refería
a su novia como “esclava morena” y le exigía que ella lo llamara
“maestro”, según ha denunciado Tanya Selvaratnam, escritora activista
educada en Harvard.
Schneiderman anunció
el lunes su renuncia poco después de que se conocieran graves
acusaciones en su contra sobre presuntas agresiones físicas a varias
mujeres con las que estuvo relacionado. Dos de ellas se identificaron
-Selvaratnam y Michelle Manning Barish-, pero otras optaron por el
anonimato.
Demócrata
de 63 años, Schneiderman era uno de los fiscales generales más
poderosos del país y había ocupado un lugar preferente en el movimiento
contra los abusos sexuales surgido el año pasado. También siempre fue
muy crítico del presidente Donald Trump y aliado en la defensa de los
inmigrantes.
Sin
embargo, el futuro político de Schneiderman se hundió en pocas horas,
luego de que el gobernador Andrew Cuomo le recomendara que renunciara
al cargo para el que fue elegido en 2010 y reelecto en 2014.
El escándalo comenzó cuando, en declaraciones a la revista New Yorker, Selvaratnam
dijo que su aventura de un año con Schneiderman “fue un cuento de hadas
que se convirtió en una pesadilla”, citando violencia en la cama y las
súplicas del funcionario de que ella aceptara un trío sexual.
“A
veces me decía que lo llamara ‘maestro’ y me abofeteaba hasta que lo
hiciera”, dijo Selvaratnam, inmigrante de Sri Lanka. También el
divorciado abogado le exigía que le dijera “que yo era ‘de su
propiedad'”
.
“No
fue consensual. Esto no fue una actuación sexual. Este fue un
comportamiento abusivo, degradante y amenazante (…) Estaba obsesionado
con tener un trío y dijo que era mi trabajo encontrar una mujer (…) Dijo
que me pegaría hasta que yo estuviera de acuerdo“.
El
abuso aumentó hasta que Schneiderman no solo la abofeteó, sino que la
escupió y la asfixió, afirmó Selvaratnam. “Raramente podríamos tener
sexo sin que él me golpeara”.
El fiscal general a menudo se vio impulsado por el alcohol y le pidió a ella que también bebiera, agregó.
En
la mista tónica habló Barish a la revista, al contar que después de una
noche de alcohol, el ex fiscal la llamó “puta” en su apartamento del
Upper West Side. “De repente, me abofeteó, con las manos abiertas y con
gran fuerza, en la cara”, dijo.
“Fue
espantoso (…) Perdí el equilibrio y caí hacia atrás sobre la cama”.
Momentos después dice que el entonces principal legislador del estado
respondió acusándola de haberlo lastimado. “Sabes, golpear a un oficial
de la ley es un delito grave”, citó Barish.
Selvaratnam,
quien mantuvo una relación con el fiscal general entre el verano de
2016 y el otoño de 2017, asegura que Schneiderman le advirtió que podía
hacerla seguir e interceptar su teléfono. Barish sostiene que estuvo
vinculada con el funcionario desde el verano de 2013 hasta enero de
2015.
Antes de ser electo Fiscal, Schneiderman fue Senador estatal de NY entre 1999 y 2010.
En
su defensa, Schneiderman envío una declaración a la revista: “En la
privacidad de las relaciones íntimas me he involucrado en juegos de rol y
otras actividades sexuales consensuadas. No he agredido a nadie. Nunca
me he involucrado en sexo no consensual, que es una línea que no
cruzaría”.(El Diario)