Nadie revisó si el líquido que bebió el presidente tenía algún tipo de infección
Alexandra Pelosi -hija de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi– dio al entonces recién investido Donald Trump una botella de agua. El presidente bebió el líquido sin que nadie comprobara si estaba infectado o contaminado.
Un nuevo libro sobre la Casa Blanca, titulado A Very Stable Genius, pone el foco en tremenda negligencia en la seguridad del presidente tan solo seis semanas después de que este asumiera.
En un extracto que publicó Vanity Fair de la obra de dos periodistas del Washington Post,
Philip Rucker y Carol Leonnig, se detalla que Alexandra Pelosi
estaba dirigiendo el rodaje de un documental en la Casa Blanca cuando
apareció el presidente.
Aquel
1 de marzo de 2017, Trump pidió una botella de agua pero, ante la
ausencia de miembros del equipo, Pelosi sacó de su bolso una botella de
Aquafina y se la acercó, según dijeron los autores del libro. Para el
asombro de la directora, aseguran, no hubo chequeos ni protocolos antes
de que el presidente aceptara el ofrecimiento.
“¿No
hay alguien que se supone que debe estar vigilando lo que come y bebe
[el presidente]?”, se preguntó Pelosi en conversación con los autores
del libro.
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