domingo, septiembre 15, 2019

Agentes de la Patrulla Fronteriza tienen la moral por el piso


La vida como agente de la Patrulla Fronteriza (CBP) es insoportable desde que Donald Trump es presidente de Estados Unidos.

Un reporte del New York Times, recoge testimonios sobre lo poco llevadero que ha sido el trabajo de cientos de agentes desde que las políticas antiinmigrantes de Trump se aplican.

Varios reconocieron que están cansados de ser llamados “asesinos de niños” o “vendidos” por los ciudadanos. Algunos solamente comen su almuerzo en restaurantes “amigables con la Patrulla Fronteriza“.

Renuncias a la orden del día

El reportaje, el principal de la edición dominical del diario neoyorquino, también revela que la agencia tiene que lidiar con decenas de renuncias.

“Enjaular personas por actividades que no eran violentas me comía vivo”, dijo un hombre de Arizona que renunció hace un año.

No hay comentarios: